Este verano estamos visitando el valle de Benasque en familia y descubriendo nuevas actividades que hacer en Benasque con niños pequeños. Es un destino ideal al que acudir con ellos. En este post recopilamos los mejores planes para hacer cerca de este valle del Pirineo Aragonés con los más peques de la casa.
Llevo más de 20 años visitando al menos una vez al año el valle de Benasque (Huesca) y casi 10 viniendo también con Dani. Lo conocemos bien, sobretodo durante la temporada de esquí. Pese a esto, este verano ha sido el primero que lo estamos viendo con los ojos de un niño pequeño. Hasta el año pasado, Lorenzo era un bebé y no condicionaba demasiado los planes que solíamos hacer.
Sin embargo, este verano nuestro hijo tiene ya 2 años y medio. Quiere y necesita explorar, correr, descubrir la naturaleza, hacer planes diferentes cada día y sentirse partícipe de todo lo que hacemos. Esto está haciendo que, por primera vez en tantos años viniendo por aquí, estemos buscando ideas de planes que hacer en Benasque con niños pequeños.
¿Qué hacer en el valle de Benasque con niños pequeños?
1. Su primera excursión: de Anciles al embalse de Eriste
Si estáis buscando una ruta sencilla para hacer una pequeña caminata, el camino que une Anciles con el embalse de Eriste es una buena opción. Es un recorrido corto, de aproximadamente media hora. No hay grandes desniveles y suele tener sombra. Por esto, es perfecto tanto si quieres hacerlo llevando a un bebé o niño/a en una mochila portabebés o bien si el niño o niña ya camina y quiere ir andando.
El sendero es muy agradable. Comienza en Anciles (donde además hay una pequeña zona de columpios y un bar con terraza muy sombreada), rodea la urbanización de Linsoles y termina en el embalse de Eriste, situado junto a esta población. Por el camino, es fácil ver vacas, caballos, gallinas, gatos, perros, insectos… así como muchos campos y vegetación diversa. También es posible reservar una pequeña excursión a caballo por los alrededores.
Si queréis ampliarla un poco más, podéis ir caminando desde el propio Benasque. Desde Benasque hay dos opciones: una por la carretera y otra por la orilla del río. Nosotros solemos ir por la carretera; es más accesible para ir con carrito y, en caso de ir andando, hay más sombras. El cauce del río se destrozó con una riada que hubo hace unos años y la orilla del río todavía está un poco falta de sombras. Pero también es un camino bonito y tiene unos columpios y zonas deportivas a mitad.
2. El embalse de Eriste con niños pequeños
La caminata de la que hablo en el punto anterior termina en este embalse. Pero es posible ir hasta allí también en coche, ya que hay un aparcamiento justo al lado.
Una vez en el embalse, los niños se divierten mucho rodeándolo, buscando patos en el lago (incluso hay un cisne), lanzando piedras al agua o buscando frutos caídos de los árboles. Para los adultos o niños más mayores, existe la posibilidad de realizar actividades acuáticas, como alquilar unas piragüas. Por otra parte, las orillas del pantano cuentan con distintas áreas de merenderos.
También es un lugar muy chulo al que acudir si visitáis el valle de Benasque en invierno. Nosotros solemos hacerlo todos los inviernos que estamos por aquí. Una de las últimas veces el agua del embalse se había congelado y la sensación de paz era indescriptible.
3. Visitar las cotas altas: zona del Ampriu y telesilla del Aneto
La estación de esquí de Cerler mantiene abierta en verano la zona del Ampriu, situada a 1.900 metros de altitud. Es un buen lugar para acercarse a las montañas con los niños más pequeños. Una vez allí, hay varias actividades que les encantarán. Hay un área con columpios y toboganes, una pequeña cascada y una zona en la que un riachuelo está accesible para acercarse a meter los pies en el agua. Además, en verano está abierto un restaurante – barbacoa al aire libre. La comida está bien, es amplio y tiene buenas sombras.
En verano también es posible montar desde aquí en el Telesilla del Aneto, que sube hasta el collado de Sarrau, a 2.320 metros de altitud. Desde allí pueden verse las cimas de algunas de las montañas más altas del Pirineo: el Maladeta, el Posets, el Perdiguero y el Aneto. Este año todavía no nos hemos atrevido a coger el telesilla porque Lorenzo nos ha parecido aún pequeño. Pero conocemos las vistas de la temporada de esquí y son alucinantes, merece mucho la pena subir.
En invierno es una zona muy buena también para que los más pequeños puedan pisar la nieve o lanzarse en trineo. También está abierta la terraza del bar – restaurante, pero suele estar a tope de esquiadores.
4. Hacer un picnic en el campo con los niños
Un buen plan para hacer en Benasque con niños pequeños es organizar un picnic al aire libre. Les encanta comer de forma diferente por un día y en plena naturaleza. Son muchas las zonas de merenderos que hay habilitadas en las orillas del río Ésera en las inmediaciones de Benasque, además de las que os he mencionado más arriba en el embalse de Eriste.
Pero además, hay muchas otras zonas a las que se puede acudir a pasar el día y hacer un picnic. Un lugar poco concurrido y muy agradable es el río Ésera a la altura del Hotel Turpi. Junto al río hay grandes praderas o zonas de piedras en las que buscar un hueco para comer. Además, el hotel cuenta con un bar en el que podéis tomar algo fresquito. Es un poco más complicado, eso si, encontrar zonas de sombra en pleno verano.
5. Descubrir los alrededores de Hospital de Benasque
El hotel de Llanos del Hospital es otro de los lugares que más nos gusta visitar en Benasque con niños pequeños. Se puede acceder hasta el mismo hotel en coche, si bien durante la temporada alta hay que dejarlo en un aparcamiento un poco más alejado (o en la carretera) y recorrer un camino asfaltado de unos 10 minutos hasta llegar al hotel.
El hotel en sí es muy bonito, el típico edificio de montaña súper acogedor. Tiene una sala de juegos para niños, una zona exterior para ellos y bar – restaurante. Y en sus alrededores los niños pueden disfrutar también de la naturaleza. Hay grandes praderas y es posible acercarse a jugar al río.
En invierno es también un buen punto para tocar la nieve. De hecho, nosotros solemos ir a hacer una excursión sencilla con raquetas, de la que os hablaré en otro post en los próximos meses.
6. Ir de excursión para ver cascadas: Las Gorgas de Alba
Si el niño o niña ya camina bien, una excursión bonita para hacer cerca de Benasque con niños pequeños es la de las Gorgas de Alba. Es un recorrido de aproximadamente una hora y poco desnivel en el que se visitan unas cascadas bastante caudalosas. Es una buena excursión para hacer en cualquier estación, ya que tiene bastantes sombras. Sin embargo, está especialmente bonito durante el otoño.
Esta excursión parte del hotel Turpi. Es posible hacer una ruta circular a través del sendero a las Gorgas de Alba y el Sendero Botánico. Nosotros, sin embargo, preferimos ir y venir siempre por la ruta de las Gorgas. El sendero del jardín botánico no está muy bien señalizado y a menudo el suelo es resbaladizo por la vegetación y la pendiente.
Si el niño o niña es pequeño para caminar tanto, es una ruta fácil para hacer con la mochila portabebés. Nosotros la hemos hecho un par de veces así y bien, tanto la distancia como la dificultad de la excursión es muy asequible para hacerla de este modo.
7. Explorar en el bosque: El Bosque de Pegá
Alejándonos unos kilómetros del valle de Benasque, podemos ir a conocer el Bosque de Pegá. Está a aproximadamente 50 minutos de Benasque, junto a la localidad de Bonansa. Se trata de una ruta de unos 400 metros que discurre a lo largo de un bosque húmedo. Está totalmente adaptada para sillas de ruedas, así que también puede recorrerse con carritos de bebés. Apenas tiene desnivel, por lo que los niños pequeños pueden hacerla caminando con facilidad. Se entretendrán mucho buscando palos, cogiendo piñas y observando los distintos insectos o la vegetación.
El recorrido finaliza en un bonito mirador sobre el valle del río Isábena. Además, desde este paseo también se puede realizar una excursión más larga en la ruta ornitológica OR-7. Es una ruta de casi 6 kilómetros con poco desnivel, pero nosotros no la hemos hecho todavía.
Si optáis por acercaros a esta zona, podéis aprovechar a visitar el Monasterio de Obarra, situado a unos 10 minutos en coche del Bosque de Pegá. Se accede a él a través de un camino de 5 minutos muy apto para los peques de la casa. De vuelta a Benasque, podéis aprovechar a visitar (o comer ahí) algunos de los pueblos que hay de camino, como Laspaúles o Castejón de Sos, o incluso desviarte un poco para conocer Liri, Ramastué y Erestué.
8. Buscar la casa del Ratoncito Pérez en Cerler
El Ratoncito Pérez tiene en Cerler su residencia de montaña. Es una pequeña puerta situada en una callejuela de la zona antigua del pueblo. Es muy divertido recorrer las calles de Cerler con los niños buscando dónde puede estar la entrada a esta casita. Es realmente pequeña (a escala del Ratoncito) por lo que hay que ir con los ojos bien abiertos. Si queréis una pista… está en la calle de la Fuente. Además, va cambiando su decoración según la época del año. Me parece un detalle súper bonito.
Actualización 2022 -> Este verano no hemos visto su casita en Cerler. No sabemos si es temporal (quizá este año ha preferido la playa para veranear), o la han quitado para siempre… 🙁
9. Jugar en las áreas infantiles de Benasque
Por muchos planes diferentes que busquemos, nuestro hijo tiene claro cual es su plan favorito: ir a los columpios. Por suerte, el propio pueblo de Benasque también tiene varios lugares perfectos para la diversión de los niños pequeños en este sentido. En el pueblo hay 4 zonas de columpios: dos en la calle mayor, otra junto a la churrería y otra junto al polideportivo.
La zona del polideportivo está muy bien también para acudir a jugar. Nosotros la hemos descubierto este año y vamos cada tarde. El pavimento es perfecto para ir con la bici o la moto. Pero además, hay zonas con canastas y un campo de fútbol al aire libre. Algunos bares, como el Rabason, también tienen su propia zona de juegos infantil.
10. Darse un baño en la piscina municipal
Benasque también tiene una piscina municipal que es muy buena opción para refrescarse durante el verano. Tiene una piscina para adultos y otra para niños, así como un pequeño bar con venta de bebidas y helados. Eso sí, el agua de la piscina de adultos está muuuuy fría. La de los niños está más templadita. Otros pueblos de los alrededores también tienen piscina municipal.
Estas son algunas de las opciones de actividades que hacer en Benasque con niños pequeños que hemos hecho este verano. Como veis, son muy variadas y entretenidas para los más peques de la casa. Me está gustando mucho descubrir este valle desde otro punto de vista y creo que es un buen destino al que ir con niños pequeños.
¿Habéis estado alguna vez? ¿Nos sugerís más planes que hacer con niños cerca de Benasque?
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